CARLOS

Hace tres años y medio, Carlos Mella (26 años) se desempeña como administrador de sistemas del Canal del Fútbol (CDF). Además, desde octubre es el tesorero del sindicato de la empresa, que agrupa a 120 trabajadores, aproximadamente, y del cual, Carlos es un socio fundador.

Lleva ocho años trabajando en canales de televisión. Antes de entrar a CDF, estuvo en Canal 13 y en Via X. En el otrora canal católico tuvo su primer contacto con los sindicatos, porque sus compañeros de área lo acercaron a la cultura sindical. A eso habría que sumar la aproximación política por el lado de su familia —su papá es democristiano— y la buena llegada con la gente que dice tener.

Cuando se integró al sindicato del CDF se encargó de desarrollar el sitio web de la agrupación, aprovechando sus conocimientos en informática. A través de su trabajo se granjeó la confianza de los compañeros, quienes le dieron la idea de candidatearse a la directiva.

“Como mi área conoce mucho a la gente, porque tenemos que darle soporte a todas las personas, yo me comunico mucho con mis compañeros. Entonces conozco el ambiente de periodistas, editores de video, sonidistas o administrativos. Sé de las realidades de cada área y las problemáticas diferentes que tienen las personas”.

Como el CDF opera en dos dependencias, calle Roger de Flor y en los estudios de Chilefilms, Carlos veía que la directiva estaba compuesta sólo por miembros del primer lugar y eso lo motivó aun más para lanzarse a la representación sindical, porque para Carlos, el sector televisivo tiene ciertas particularidades que necesitan ser atendidas.

“Los canales de televisión son mundos muy pequeños y la gente va rotando mucho. Las mayores problemáticas tienen que ver con los sueldos y horarios de trabajo. Eso lo vi en C13, en Vía X y también aquí en CDF”.

Carlos relata que la experiencia como dirigente le ha servido para aprender “las leyes laborales, la comunicación con compañeros, las discusiones con la empresa de acuerdo a nuestros puntos de vista, tener convenios y la distribución del dinero”. Aun así, califica esta etapa como “de aprendizaje”.

Su mirada sobre los dirigentes sindicales jóvenes se centra, fundamentalmente en la renovación, “para entregar ideas frescas, fuerza en algunos temas y ver problemáticas desde la parte juvenil. También para potenciar al sindicato, para que el usuario se sienta cómodo y que no le tenga miedo a sindicalizarse, porque es algo bueno para el trabajador y para la empresa”.