NOTICIA: Los tripulantes de cabina, que cumplieron 15 días movilizados, denunciaron una postura intransigente de la empresa que les exigió extender los beneficios al resto de los trabajadores para continuar negociando.

[Santiago, 25 de abril de 2018] La huelga de los tripulantes de cabina de Lan Express continúa a 15 días de su inicio el pasado martes 10 de abril. Esto luego de que el sindicato rechazara con un 94.1% de las preferencias la última oferta presentada por la empresa, por no tener acuerdo en puntos referentes a los días de descanso, una compensación económica por la movilización y, principalmente, la extensión de beneficios.

Por medio de un comunicado, el sindicato señaló que la empresa les exigió renunciar al derecho de decidir no extender los beneficios a los trabajadores no sindicalizados. Por su parte, indicaron, ofrecieron entregar una extensión parcial de los beneficios, pero la empresa lo rechazó de plano.

Los trabajadores enfatizaron en que han renunciado a todo incremento salarial y que también descartaron de su demanda tener un día libre extra, sin embargo, la empresa no ha cambiado su postura para negociar.

La presidenta del sindicato, Silka Seitz, sostuvo en conversación con Radio Biobío que “si la última oferta se rechazó es porque no está la posibilidad que el documento sea redactado por ambas partes, lo que a nosotros nos afecta muchísimo porque queda absolutamente a discreción de la empresa como queda escrito el documento”, a lo que agregó “hay puntos que no estaban en esta nueva oferta pero que sí habían sido conversados durante la mesa y que la empresa, por razones que desconocemos no quiso incluir”.

Ahora, el sindicato enfrentará el período de descuelgue de la huelga lo que señalan, era parte de la estrategia de la empresa que apostaría por el desgaste de los movilizados, considerando que también comenzarán a aplicarse los descuentos por los días no trabajados.

Por último, desde el sindicato hicieron un llamado a los accionistas de Latam que se reunirán este jueves 26 de abril en la junta de accionistas de la aerolínea, para que fiscalicen la gestión de la administración en el desarrollo del conflicto.