NOTICIAS: Son 183 trabajadores de las minas de carbón, que hace unos meses recibieron la intervención del estado para tener una serie de beneficios, lo que según ellos, no han sido cumplidos.
[Curanilahue, 07 de diciembre 2016] En agosto del año pasado 73 pirquineros pertenecientes a la Mina Santa Ana de Curanilahue finalizaron la huelga que tuvieron por 14 días dentro del pique a más de 300 metros de profundidad. En dicha oportunidad, el gobierno intervino e incluso entregó beneficios para los involucrados, pero a más de 12 meses del hecho, poco se concretó, según los trabajadores.
Por este motivo, durante la tarde del lunes pasado, 60 de los empleados de la empresa, que se mantiene sin operar hace más de un año por las pocas condiciones de seguridad, se volvieron a internar en la mina a la espera de que el ejecutivo actúe y haga que la mina otra vez opere con normalidad, pese a que en el último presupuesto acordado por el Senado se rechazó esa opción.
El dirigente, Miguel Sáez sostuvo que “el gobierno a través del protocolo de acuerdo que se firmó en su momento nos ayudó con cursos de capacitación, pero hace dos meses que terminaron, por lo tanto decidimos intentar reactivar la mina extrayendo carbón nuevamente, lo que paso fue que el síndico de quiebra nos demandó por robo de carbón por lo cual nuevamente quedamos a brazos cruzados”.
Lo que piden los movilizados es que alguien cancele los $500 millones de quiebra para volver a operar las instalaciones mineras, algo que debe ejecutar antes del 15 de diciembre, por dicha razón, solicitaron ayuda a las autoridades, aunque sin respuesta positiva.
De no tener novedades, los trabajadores no descartan que se sume más gente a la movilización dentro de la mina, que según el Sernageomin tiene una vida útil de 15 años más, lo que la hace inestable y peligrosa.