NOTICIA: La última oferta de la empresa se las hicieron llegar el viernes pasado y es “exactamente la misma” que ya había rechazado el 98% de los afiliados al sindicato, iniciando así la huelga que entra en su segunda semana.
[Santiago, 17 de agosto de 2018] Desde el 3 de agosto que los(as) trabajadores de la empresa de televenta de seguros CallSoulth paralizaron sus actividades en respuesta a la rígida postura de la compañía, la que calificaron no solo de “extremadamente soberbia y un total desprecio a sus trabajadores” sino también “un insulto a la inteligencia de los trabajadores” toda vez que la compañía argumenta que no puede acceder al petitorio porque “no hay dinero” para sustentarlo (VER NOTA ANTERIOR).
Así concuerdan Lorena Bustos y Andrés Castillo, presidenta y secretario respectivamente, del Sindicato N°1 de Empresa CallSouth (empresa del Grupo MOK, con presencia en Chile, Perú y Colombia). La última oferta de la empresa se las hicieron llegar el viernes pasado y es “exactamente la misma” que ya había rechazado el 98% de los afiliados al sindicato, iniciando así la huelga que entra en su segunda semana.
El proceso de negociación ha estado salpicado de irregularidades, como que se entorpeció el proceso de votación de la última oferta o huelga; la contratación de más 250 empleados entre junio y julio; además de la animosidad de los empleadores hacia al sindicato manifestada desde que se constituyeron, en enero de este año, con rumores, amenazas solapadas, todo para “demonizar” no solo la sindicalización sino también “la huelga, engañando al trabajador siendo que la huelga es una herramienta de presión que tenemos los trabajadores”, señaló la dirigente.
En esencia, solicitan aumentar en $18 mil su sueldo base y establecer bonos de locomoción y colación (que no tienen) de $18 mil cada uno y un Bono de Término de Conflicto (BTC) de $380 mil, son los puntos de quiebre. CallSouth, dijo “no a todo” aunque les ofrece un BTC de $67 mil bruto.
Incrementar el sueldo base es de suma importancia porque sus remuneraciones solo crecen con las comisiones variables: “El comisionista vive del variable, por lo tanto el sueldo jamás está seguro. El sueldo base es el mínimo legal”. No obstante, el argumento para negarse a subirlo en $18 mil es que “no hay dinero”, cuenta Bustos. No obstante, a juicio de los dirigentes, los números de la empresa son muy azules: “Aquí estamos hablando de una empresa que pertenece a un holding económico que tiene participación en tres países”, acota Castillo seguro de que los cálculos financieros que ellos hacen, no calzan con lo que dice la empresa: “No nos miremos la suerte entre gitanos: Aquí lo que buscan es insultar la inteligencia de los trabajadores”.
La apuesta de la empresa, explican, son por ítems sociales del petitorio pero ahí, tampoco ofrecen lo que realmente se quiere. Por ejemplo, en el caso de muerte de un trabajador, la empresa les dijo que puede dar una especie de “bono compensatorio” pero lo que el sindicato solicita es que se pague a los familiares los años de servicio del trabajador al momento de fallecer: “Finalmente es una plata que uno como trabajador espera que su familia reciba, o sea si yo me muero, no puede ser posible que la empresa no pague ni un peso, no le entreguen nada a mi familia”, precisa Castillo.
Sobre las condiciones laborales, la situación tampoco es muy distinta a las ya denunciadas por todos los trabajadores de los call center del país: “Entre cada llamada telefónica, uno no alcanza a pestañear y el jefe ya te está gritando. El sistema es gritar, gritar para que la gente llame, llame y llame”, cuenta Bustos, graficando con ello el clima de maltrato y hostigamiento laboral. Estas también fueron algunas de las razones que los llevo a constituir el sindicato.
Y por ahora, están analizando la última oferta pero claramente los empleadores, reiteran, “no están escuchando los requerimientos legítimos de los trabajadores”.