NOTICIA: Los sindicatos reunidos en la federación de Walmart decidieron deponer la huelga, a raíz de la última oferta entregada por su empleador. Según lo contado por el dirigente nacional, Manuel Díaz, “ aquí no es un tema de plata es un tema de ideología”.
[Santiago, 18 de diciembre 2014] Los trabajadores de Walmart decidieron tomar un receso y permitir la venta en los locales durante los días martes y miércoles. A pesar de esta flexibilidad en la postura de la Federación, la empresa les dio un ultimátum. Si no aceptaban la última oferta, los locales cerrarían sus puertas hasta el 26 de diciembre, justamente el día 15 de la huelga.
“La oferta es muy inferior a lo que nosotros esperábamos. Nos castigaron con cobrarnos los siete días en huelga, el bono de término de negociación será inferior al de otras organizaciones que ya negociaron, y todo por habernos osado a enfrentarnos a la compañía”, lamentó Manuel Díaz, presidente de la Federación.
Lo que propuso la empresa debía ser aceptado ayer, durante la asamblea que se realizó con los dirigentes de los sindicatos de base. “De no hacerlo se caía todo, la compañía iba a cerrar todos los locales hasta el 26 y no tendría ninguna efectividad una huelga en esas condiciones”.
Con ese fin “la empresa puso toda la plata disponible desde Estados Unidos si era necesario. Le dijeron a los gerentes de los locales que este año no tenían metas que cumplir a causa de la huelga, estaban perdiendo 35 mil millones de pesos diarios y a la compañía no le importó. Aquí no es un tema de plata es un tema de ideología”, aseguró Díaz.
La propuesta de contrato colectivo de los trabajadores incluía un aumento en sus salarios por tramo de 5, 8 y 12%; pero finalmente eso quedó en un 2, 4,8 y 5%. El bono por término de conflicto tampoco dejó satisfechos a los trabajadores, que es la mitad de lo que obtuvieron otras organizaciones sindicales antes.
“La compañía Walmart quiso darle una lección a todos los trabajadores de Chile y me parece que lo lograron, porque si nosotros seguíamos en esta batalla obviamente que estábamos destinados a un daño permanente”, concluyó el dirigente.