NOTICIA: Más de 600 trabajadores se movilizaron por el Paseo Ahumada hasta el frontis de La Moneda en medio de las huelgas que llevan a cabo ambas empresas del transporte de valores. Acusan al estado de ser el principal “rompehuelga” del movimiento.
[Santiago, 26 de mayo de 2015] A las 9 de la mañana los trabajadores de Prosegur y Brinks se reunieron en la Estación Mapocho para luego protestar por el Paseo Ahumada hasta llegar a la Plaza de la Constitución, todo en medio de las huelgas legales que llevan a cabo hace más de dos semanas, y que aún no tiene solución para los involucrados.
En el caso de los 1.047 trabajadores a nivel nacional de Brinks, suman 15 días movilizados, con dos negociaciones frustradas de por medio.”El lunes nos presentaron la última forma de un 1% de reajuste y bono bajo de nuestras expectativas”, aseguró Roberto Leiva, presidente del sindicato.
Prosegur tiene una situación aún más compleja. 19 días paralizados y sin una mesa de diálogo, debido a la “intransigencia de la empresa”, según enfatizan desde el sindicato, lo que es la tónica de este conflicto, que parece no tener un final cercano según Hugo Muñoz, mandamás de los trabajadores. “La empresa se niega a conversar con nosotros y hoy nos tiene en la calle. Ellos están avalados por el estado, que ha faltado al cumplimiento de los decretos, y eso nos tiene protestando”, enfatizó.
Desde ambas marcas de transporte de valores apuntan al gobierno como la piedra de tope, ya que según Leiva “el estado ha actuado como un rompehuelga, autorizando a los banco para abrir el fin de semana violando el artículo 1814, que restingue el funcionamiento de los horarios de lo camiones”.
Algo que también comparte el presidente de Prosegur, quien aseguró que “nunca pensamos que un tema laboral iba a tener tanta connotación política. Esto se ha decantado por la reforma laboral, los empresarios quieren tener un piso lo más bajo posible y eso ha complicado todo, además, el gobierno es el rompehuelga de esta movilización”.
Con el pasar de los días el conflicto se complica más para los involucrados, tanto que se presentó un reclamo en la Contraloría (VER NOTA ANTERIOR) por el actuar de la Superintendencia de Banco, pero “no hemos tenido respuesta, lo único que tenemos claro es que los bancos y el estado están complicando las negociaciones”, indicó Hugo Muñoz.
Mientras que desde Brinks precisaron que “estamos esperando la respuesta, el Superintendente (Eric Parrado) quiso descomprimir este movimiento, por eso las conversaciones están congeladas. El estado tiene velar por los trabajadores, pero eso no se ha visto en todo este proceso”.
Lo que llamó la atención de los más de 600 trabajadores que se congregaron en el centro de Santiago, fue la característica internacional que está adquiriendo la huelga de Prosegur y Brinks, ya que más de 16 países se han manifestado a favor del huelguistas, incluso, una delegación desde Brasil llegó a apoyar el movimiento, así lo acotó Muñoz. “Acá tenemos más apoyo internacional, que nacional. Queremos que la ministra se pronuncie y existe voluntad desde el gobierno. Es insólito que afuera estén más pendiente de nuestras movilizaciones que en Chile”, cerró.