NOTICIA: Luego de quince días el sindicato de la emisora finalizó ayer la huelga, sin llegar a acuerdo con la empresa. A través de un comunicado los trabajadores informaron que rechazaron la oferta de la empresa y que se acogieron al piso de la negociación, “la empresa tendrá que negociar en 18 meses más y no en tres años más como lo buscaba Radio Bío Bío”, explicó al Desconcierto el presidente del sindicato Narayán Vila.
[Santiago, 15 de octubre 2019] La declaración suscrita por los trabajadores sindicalizados la tarde de este lunes 14 de octubre, señala que después de 12 días lograron reunirse con representantes de la familia Mosciatti, quienes les señalaron que no cederían en ningún punto de la negociación en curso en la emisora. Desde el sindicato enfatizan que la movilización pudo extenderse por mas tiempo: ” Sin embargo la respuesta habría sido la misma, lamentamos la intransigencia y mala fe durante el proceso de negociación, repudiamos los reemplazos en la huelga constatados por la inspección del trabajo.”
Sobre el regreso a sus labores profesionales, los comunicadores sindicalizados decidieron por unanimidad deponer la movilización, rechazando la última oferta del empleador y acogiéndose al piso de la negociación, finalizando la huelga y retomando sus actividades a contar de hoy martes. Al respecto, el presidente de la organización sindical, Narayan Vila declaró que “la empresa tendrá que negociar en 18 meses más y no en tres años, lamentablemente las cláusulas ofrecidas fueron rechazadas por la asamblea, pero se aplicarán como contrato colectivo al ser el piso de la negociación. Esta huelga termina sin acuerdo y con un gran triunfo para nosotros: abrir el debate sobre las extensas jornadas en los medios de comunicación, la precariedad y la explotación, sustentada en el mal uso del artículo 22 del Código del Trabajo”.
El presidente del sindicato de radio Bío Bío, destaca en la declaración publicada el día de ayer: “Queremos que la familia Mosciatti entienda que este sindicato llegó para quedarse, porque lograr jornadas más humanas, menos precarias y bien retribuidas es un imperativo ético y moral de todos y todas. No queremos más colegas con problemas de ansiedad o depresión, como ocurre actualmente con el agobio laboral. Nos apena y frustra ser una empresa donde estamos empujando a trabajadores/as, sobre todo jóvenes, a licencias médicas porque no logran conciliar su actividad laboral con el descanso y la familiar”.