NOTICIA: En una réplica en miniatura del Palacio de la Moneda hecha en madera las trabajadoras de casa particular, los trabajadores de edificios y el sindicado de trabajadoras sexuales, tuvieron la oportunidad de realizar sus discursos, aludiendo a sus principales demandas. La instalación recorrió además lugares históricos de la capital, en el marco del festival Santiago a Mil.
[Santiago 16 de enero 2014] Más que convulsionar Santiago con la obra “Desplazamiento del Palacio de La Moneda”, el objetivo por parte del director Roger Bernat, era hacer visible a la gente las historias olvidadas de la ciudad. La actividad se trató de una delicada maqueta del edificio de gobierno, de dos metros y 80 kilos de peso, hecha de madera en un taller de la población La Legua y que se desplazó como si fuera una procesión o minga chilota, transportada por los propios participantes.
El trayecto incluyó distintos lugares de Santiago entre los que destacaron el cementerio general y la población La Legua. “Todas las ciudades tienen trayectos simbólicos que varían con el tiempo: las procesiones funerarias, las manifestaciones del 11 de septiembre. Son recorridos que hablan de su historia, pero nosotros hacemos un trayecto peculiar: Vamos desde el centro a la periferia”, explicó Bernat a la prensa.
“Los trayectos en general son visibles, pero nuestra voluntad es hacerlo inverso y volver frágil a La Moneda. No tratarla como el símbolo inamovible que es, sino entregársela a las personas, para que ellas hagan y digan lo que quieran”, argumentaba el director de la obra. Y precisamente fueron varios los sindicatos y agrupaciones ciudadanas que participaron en esta actividad teniendo la posibilidad de expresarse.
“Desde esta Moneda ciudadana que sale a caminar por las calles rodeada de las organizaciones y sus demandas, como siempre debe ser, exigimos: jornada de 8 horas diarias, fiscalización real, definición del tipo de funciones y lugar donde se realizarán. Y además el cumplimiento del compromiso presidencial: la ratificación del Convenio 189 de la OIT en Chile”. Palabras de Ruth Olate, presidenta del Sindicato de Trabajadoras de casa particular (SINTRACAP).
La Federación nacional de Trabajadores de edificios y condominios (FENATESAC), también estuvo presente en la actividad. Su presidente, Alejandro Ibaceta también tuvo palabras: “somos trabajadores del servicio y no servidumbre, llamo a que se respete el acuerdo internacional con la OIT sobre el artículo 171, el cual se refiere al trabajo nocturno como trabajo pesado por lo que se debe pagar como tal”.
Fueron cerca de 30 las organizaciones que “dieron su discurso en La Moneda”, entre las que destacan el Sindicato Nacional Independiente de Trabajadoras Sexuales Amanda Jofré, No Alto Maipo, el Comité de Refugiados Peruanos y el movimiento Furiosos Ciclistas, entre otros.
