ENTREVISTA: El delegado de la organización de empresarios católicos más importante de Europa, UNIAPAC, visitó Chile. Rodrigo Whitelaw, destacó la importancia de discutir sobre cambios en la educación y la seguridad social.
[Santiago, 18 de octubre 2013] Rodrigo Whitelaw es economista chileno, pero su nacionalidad se hace poco evidente ante el acento neutro que ha adquirido tras años de vivir en el extranjero. Vive hace ya casi diez en Europa, donde realizó un doctorado en Política y Ciencias Sociales. Desde abril del 2012 trabaja en La Unión Internacional Cristiana de Dirigentes de Empresas (UNIAPAC), donde actualmente es Delegado General.
La Fundación nació en 1931 compuesta por diversas federaciones de empresarios católicos de Bélgica, Francia y Alemania, en ocasión del 40 aniversario de la Encíclica “Rerum Novarum” en Roma. Actualmente la UNIAPAC representa a más de 30 mil empresarios, congregado a más de 26 agrupaciones en Europa, África y América Latino.
Whitelaw visitó Chile para interiorizarse sobre las actuales problemáticas laborales en Chile, la realidad empresarial y las posturas sobre diversos temas sociales que ha expresado el gremio. Para ello, tuvo una reunión en la Vicaría de la Pastoral Social y de los Trabajadores con Guillermo Sandoval, Jefe del Área de Animación Laboral de la institución y con Patricia Roa, oficial de programación de la OIT y presidenta de Trabajo para un Hermano; también se reunió con el rector de la Universidad Alberto Hurtado, Padre Fernando Montes; y finalmente visitó a la mesa directiva de la Unión Social de Empresarios Cristianos (USEC).
Para la UNIAPAC, que emitió una Declaración respecto al trabajo decente y la agenda de desarrollo post 2015, la seguridad social, la educación y el diálogo social son elementos claves para el progreso de los países.
¿Qué conoce la UNIAPAC sobre la realidad laboral en Chile? Ustedes en su declaración se refieren al desempleo juvenil y el trabajo de inmigrantes, que son temas que se han tratado poco en Chile.
Claro, son temas incipientes en Chile. En una reunión que tuvimos en la Vicaria de Pastoral Social y de los Trabajadores este miércoles pude tener más antecedentes sobre las problemáticas que hay que discutir en Chile, como la subcontratación, la negociación colectiva, el trabajo parcial y sobre todo la capacidad de diálogo que se logre entre los empresarios, los sindicatos y el Gobierno, para avanzar en esos temas.
¿Cómo se ha desarrollado la relación entre la UNIAPAC y los empresarios chilenos?
La UNIAPAC trabaja para sus asociaciones locales y al servicio de ellos, en el caso de Chile es la USEC. Y vamos a trabajar cada vez más vinculados. Juntos aportamos desde Europa.
Llama la atención que en la declaración de la UNIAPAC le dan mucha relevancia a la protección social.
El tema de la seguridad social es transversal y orientado a todos los países, pero teniendo en cuenta que los contextos son diferentes. No es lo mismo comparar los sistemas de Europa con los de América Latina, hay diferentes modelos y grados de avances, pero hay un consenso en que los países deben avanzar en la protección social. De todas formas, sabemos que cada país tiene sus variantes, lo importante es que entre todos los actores tienen que definir qué modelos son los más adecuados.
¿A qué se debe que en dicha declaración se destaque mucho la importancia de la educación y su relación con el trabajo?
La educación, la capacitación y la formación son los motores para el desarrollo. Y está relacionado con la temática del empleo juvenil y de fortalecerlo. En Europa hay varias iniciativas, específicamente en Francia, Italia y Alemania, para facilitar la inserción de los jóvenes al trabajo, acerca de la educación con las empresas.
Yo creo que es un tema en donde hay que avanzar, ya que es un tópico que está en el tapete. Sabemos que los empresarios son un grupo diverso, pero tendrán mucho que decir y qué aportar en este tema.
¿Un empresario católico o cristiano, debe ser o actuar distinto a uno que no lo es?
No, no tiene que ser distinto, pero sí hay valores muy claros de la Iglesia en su Doctrina Social, como el bien común, la solidaridad y subsidiaridad, que son principios bien claros que nosotros defendemos como UNIAPAC y tratamos de difundir.
No haría la diferencia, porque muchos de estos valores son adoptados por otras religiones y también son valores de carácter humanista.