NOTICIA: La municipalidad publicó una nueva ordenanza donde formalizan la entrega de permisos a trabajadores ambulantes. Algunos trabajadores cuestionan la forma en que se desarrolló.
[Santiago, 10 de octubre de 2013] Mientras que hoy existen 1.683 permisos para ambulantes en la comuna de Santiago, se calcula que son 1000 las personas que trabajan ilegalmente y que arriesgan ser detenidas por Carabineros si son descubiertas vendiendo en la vía pública.
Para formalizar la entrega de permisos para los trabajadores urbanos y vendedores ambulantes, la Municipalidad de Santiago promulgó la ordenanza N° 59, a partir de la cual define criterios claros y objetivos para el otorgamiento de éstos. También busca definir una política de uso del espacio público, que sea armónico con el paisaje y un aporte al bienestar de las personas que viven y transitan por la comuna de Santiago.
Para Juan Córdova, presidente del Sindicato Nuevo Amanecer, que agrupa a trabajadores con situación de discapacidad física, principalmente no videntes, la forma en que se ha construido la nueva norma es poco democrático y no ha incorporado debidamente la experiencia de los sindicatos de trabajadores ambulantes que llevan años en el tema. “Yo le vengo pidiendo a la Alcaldesa hace más de tres meses una mesa de diálogo y ella hace una ordenanza municipal y no nos consulta, ni siquiera a los que somos vecinos”.
“La gente que está trabajando en el centro de Santiago son personas vulnerables, para una persona con discapacidad no es grato estar acá, tienen que soportar las inclemencias del tiempo, en el verano soportar el calor y en el invierno, el frío”, explicó Córdova.
Justamente, para la Municipalidad el criterio para otorgar los permisos fue ofrecer un espacio para quienes no tienen otra posibilidad de trabajo. Por esto no podrán pedir un permiso las personas que tengan iniciación de actividades o negocios establecidos, ni quienes tuvieren algún permiso o concesión vigente en la comuna de Santiago u otra.
Entre los indicadores de selección estaba el lugar de residencia, dándosele preferencia a los residentes de la comuna, seguido por aquellos que viven en comunas vecinas, y en tercer lugar comunas o sectores vulnerables. Otro indicador fue poseer algún tipo de discapacidad que le complicara tener un trabajo estable. También se tomó en cuenta la situación socioeconómica, a partir del puntaje de la Ficha de Protección Social.
De este filtro quedaron 236 seleccionados, de los cuales sólo 63 residen en la comuna de Santiago y el 68% de ellos presenta alguna discapacidad física.
Son cerca de 50 los afiliados al Sindicato de Córdova, entre los que hay vendedores de lentes, de bufandas, de calcetines, de sombreros, entre otros. Algunos de ellos no han recibido el permiso, como sucede con Miguel Muñoz, quien es no vidente y aún no ha sido informado, por lo que teme haber quedado fuera por tener un permiso en la municipalidad de San Bernardo que según él no utiliza desde el año 2004.
“Si yo tuviera una fuente de trabajo no estaría acá arrancando de los inspectores, los discapacitados no tenemos otra opción de poder trabajar en otra área que no sea el comercio, no es porque sea tan lucrativo”, expresó Muñoz.
Los permisos durarán 6 meses y hasta que termine el periodo no se entregarán más permisos. Serán intransferibles, con lo que la municipalidad busca ordenar el traspaso y venta de permisos que operó en el pasado.
La ordenanza ya está operativa desde el 25 de septiembre, pero las personas que postularon están siendo informadas durante esta semana del resultado final, información que se entregará hasta el día 20 de octubre.