NOTICIA: Richard Bobadilla, trabajaba en la división Radomiro Tomic de Codelco, cuando fue diagnosticado por una fuerte depresión, la cual se produjo por el acoso laboral que sufría a diario. Fue cambiado de área sin explicación y luego no ha sido reintegrado. Hace casi un mes comenzó una huelga de hambre en las afueras de la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC), quienes tampoco le han brindado ayuda.
[Santiago, 22 de mayo de 2017] Compleja es la situación de Richard Bobadilla, operario de grúa, oriundo de Arica, que hasta noviembre de 2012 se desempeñaba como funcionario de Codelco en la división Radomiro Tomic. Todo comenzó cuando el trabajador tuvo aspiraciones sindicales dentro de la minera, una vez ocurrida la votación, en donde no fue elegido, inicio un calvario para Bobadilla el cual todavía no termina.
Con el pasar de los meses fue asignado al área de recursos humanos, pese a que él no tiene conocimientos en dicho sector. Fue ahí en donde sufrió el acoso del gerente de la división y el jefe de turno, lo que derivo en una depresión.
Richard narró que “me ha amenazaron, no tuve asignación de labores durante muchos días, me realizaron exámenes de alcohol y drogas fuera de procedimiento, además la empresa armó un montaje y organizó faltas en mi contra, como organizar un partido de la selección chilena sin autorización o retirarme antes de la hora de trabajo”.
Tras asistir a la Mutual de Seguridad, esta entidad determinó que la depresión de Richard no tenía un carácter laboral, algo que fue revertido por la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso). “Yo sabía que mi salud estaba mal, pero ellos jugaron conmigo. Por suerte en 2014 se comprobó que el tema se produjo por la gente de Codelco, pero aún así estuve sin atención mucho tiempo, incluso, pasando por el sistema público de salud”, contó.
Lo que ahora solicita el trabajador es que “se haga valer el artículo 71 de la ley de las enfermedades profesionales, quiero ser integrado a las labores normales y la empresa está obligada a reubicarme en un área en donde no suceda lo mismo que la vez anterior y pueda desempeñarme como tal, espero que se haga cumplir, pero ni la empresa si la Federación de Trabajadores se han manifestado”.
He ahí el sentido de la huelga, ya que Bobadilla pidió al consejo de la Federación de Trabajadores del Cobre que su tema fuera zanjado, pero dicha entidad le cerró la puerta al trabajador. “Yo quería iniciar mi huelga dentro de las oficinas, pero el presidente de la FTC, Raimundo Espinoza, dio la orden que me sacaran con Carabineros, pese a que yo quería hacer mi movilización…No sé por qué han sido así conmigo”.
Pese a la distancia entre Arica y Santiago, Bobadilla añade que “yo vine varias veces a hablar con el consejo con todos los antecedentes para reintegrarme, eso se lo comenté al abogado de la federación, quien incluso me dijo que estábamos dentro del plazo de apelación, pero el consejo debe tomar la decisión de la reincorporación. Después me dijeron que estoy fuera de plazo -algo que es falso ya que dicha fecha se cumple en noviembre de 2017- y la federación no va a pedir mi reincorporación, entonces no veo la voluntad para ver mi situación”.
Finalmente añadió que “es un tema súper complicado, llegue desde Arica con la intención real de solucionar esto. Estuve 19 días a la intemperie, pero dirigentes de la ANEF, agrupación de Derechos Humanos y otras me consiguieron una carpa para estar afuera de la federación…Yo no he firmado mi finiquito, ni mi carta de renuncia, lo único que quiero es recuperar mi trabajo normal hasta que ellos me enfermaran”.