NOTICIA: Hace un mes un grupo de trabajadores formó un sindicato en la imprenta INK&PAPER, pero desde el inicio tuvieron que enfrentarse a prácticas antisindicales, primero el despido del presidente del sindicato, y ahora la amenaza de desvinculación de todos los socios.

[Santiago, 10 de julio de 2017] El 09 de junio de 2017 se constituyó el sindicato de trabajadores y trabajadoras “Tinta y Papel” de la empresa INK&PAPER Ltda., entre sus objetivos fundantes está el de velar por los derechos de los socios, conseguir mejoras en sus condiciones laborales y terminar con la toma de decisiones unilaterales al interior de la imprenta.

En un comunicado el sindicato informó, que “desde nuestra conformación los socios han sido inducidos a dejar la organización amenazándoles con su estabilidad laboral y condiciones (de trabajo). Al presidente lo desvincularon al siguiente lunes (de la conformación del sindicato), (…) al que tuvieron que reincorporar por orden de la Inspección del Trabajo debido a su fuero”.

La presidenta del sindicato BCI, Carolina Guerra, que ha acompañado a la organización en este proceso, informó que se les está obligando a los trabajadores a que hagan “votaciones, porque la empresa les dijo que tenían que censurar (al presidente del sindicato), que si lo censuraban ellos no iba a despedir a nadie, pero si no lo hacían, los van a despedir a todos”.

El presidente del sindicato, Marcelo Rodríguez, podría ser censurado en una votación que se llevará a cabo este martes. Él al respecto señaló que “el trabajo sindical es fundamental para una empresa como INK&PAPER, ya que por su tamaño, cantidad de trabajadores (150) y rubro, nos ayuda a poder visualizar las necesidades y ayudar en el cumplimiento de las normativas legales de la empresa para con los trabajadores como viceversa”.

Guerra, agregó que “ojalá que mañana (martes 11 de julio) los socios no voten en contra de la organización por miedo. La gente tiene que entender que hay que resistir, que hay que dar la pelea y hacer frente ante estos empresarios”.

Por ahora, Rodríguez interpuso ante la Inspección del Trabajo dos denuncias, una por no otorgamiento del trabajo convenido al dirigente del sindicato, ya que luego de su reincorporación se le asignaron funciones que no correspondían al trabajo que estaba haciendo hasta su desvinculación; y otra por práctica antisindical, específicamente, la que señala que el empleador hace actos de injerencia, para intervenir el sindicato según sus intereses.