NOTICIA: La identificación de problemas y el planteamiento de nuevos desafíos fueron la tónica del taller “Respetar la diversidad LGBTI”, organizado por la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) y el Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh).
[Santiago, 14 de enero de 2016] Para el presidente del Movilh, Ramón Gómez, la discriminación que sufren las personas LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexuales) está dentro del marco de lo que llamó “discriminación estatal”.
“Esto se expresa en que no hay una ley de matrimonio igualitario para todas las personas. No hay una ley de identidad de género que permita a las personas cambiar su nombre, además se estableció diferentes edades de consentimiento sexual para homosexuales y heterosexuales”, señaló el representante.
Del Centro de Derechos Humanos de la Universidad de Chile, Tania Manríquez indicó que “el taller consiste en identificar cuáles son los principales problemas y desafíos frente a la población LGBTI en relación a su vínculo con funcionarios públicos”.
En tanto, para la Corporación de Asistencia Judicial la idea de esta actividad es ser una caja de resonancia para aquellas personas que atienden en el sistema público “Este taller es el segundo de los tres que se ha realizado a lo largo del país, y cuenta con el apoyo del fondo Valetín Letelier de la Universidad de Chile”, aseguró el representante de la CAJ, Daniel Pérez.
Gómez, mencionó que en Chile quienes más sufren de discriminación laboral son los transexuales a quienes definitivamente no se les da trabajo y que muchos de los empleadores cuando se enteran que sus trabajadores son homsexuales comienzan a ejercer una serie de presiones.
Agregó que, “en el caso de los gays generalmente los ridiculizan, y en el caso de las lesbianas va acompañado de acoso sexual. Muchas veces les tocan las mejillas, la cabeza, eso es violencia simbólica”.
