NOTICIA: El sindicato N°2 que lideran tres mujeres en Fruna lleva recién un año en la empresa y, según señaló su tesorera, Dayana Meza “lo quieren destruir”. Las dirigentas denuncian prácticas antisindicales y el despido de toda la directiva, sin respetar el fuero sindical que las cubre hasta seis meses después de finalizar su período en 2019.

[Santiago, 30 de junio 2016] En Fruna hay dos sindicatos funcionando, pero el afectado lleva solo un año desde su creación en 2015, y durante noviembre de 2016 les tocaría su primera negociación colectiva. Según Meza, “este no es el primer sindicato que destruye, ya lo han hecho antes y es lo mismo que quieren hacer con nosotros antes de que negociemos”.

Al sindicato N°1 la dirigenta lo señaló como afín a la empresa y en la actualidad no tienen problemas. “Para hacerte el contrato indefinido luego del período de prueba, te obligan a entregar tu aporte sindical para el N°1, si no, no te contratan. Pero el ellos no consultan sus decisiones con las bases, no hacen ni siquiera asambleas”, señaló la dirigenta.

El día 20 de junio el gerente general de la empresa les prohibió la entrada a la planta a las tres dirigentas del sindicato, sin justificación alguna. Cuando las afectadas hicieron la denuncia a la Inspección del Trabajo y ésta realizó la fiscalización, recién se enteraron de que habían sido despedidas.

“No sólo somos nosotras. Partimos el sindicato con 310 afiliados y ahora van 100 menos, entre gente que han despedido y otra que han amenazado para que salgan de la organización. Ahora, solo estas últimas dos semanas han desvinculado a cuatro socios más”, dijo Meza.

Entre las acciones que están llevando a cabo como directiva, está la denuncia en la Inspección del Trabajo por prácticas antisindicales y una demanda que presentaron de forma particular, este miércoles en contra de Fruna, por despido injustificado, solicitando la medida cautelar de reintegro inmediato mientras dure el período de investigación.

Su causa se incorporó, además, en una demanda internacional presentada en contra de Chile ante la OIT por prácticas antisindicales. El sindicato ha sido apoyado por otras organizaciones, y ha realizado manifestaciones afuera de la planta, medida que no descartan volver a ocupar en el futuro.