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Conociendo nuevas dirigentas: Nicole Gallardo, Sindicato Universidad Santo Tomás


Nicole Gallardo, de 37 años, es contadora auditora de la Universidad Santo Tomás desde hace diecinueve años y presidenta del sindicato de esa institución desde hace dos años. Nicole cuenta que se integró al sindicato apenas se creó la organización y fue parte de la directiva como tesorera desde el 2019 al 2022, año en que postuló a la presidencia del sindicato.

¿Cuándo te integraste al sindicato?

Cuando entré a trabajar, que fue en el 2006, no existía sindicato acá en la universidad. El sindicato se fundó por ahí en el 2008 con otra directiva. La primera dirigenta fue Francisca Zubicueta, ella partió el 2008 con la organización y estuvo en el cargo antes que yo. Cuando se creó la organización inmediatamente me sindicalice. 

¿Qué te motivó a postular al cargo de presidenta del sindicato?

Hubo varios factores. Yo creo que lo más importante es que siempre la organización en sí fue súper unida. Partimos solamente aquí en Santiago, por lo que siempre teníamos contacto con todo los socios en ese momento y luego, tuvimos huelga así que los lazos fueron creciendo. Ya en el 2013 aproximadamente, el sindicato creció a nivel nacional y postulé a la directiva en el año 2019. Siempre me gustó el ámbito social, el tema de trabajar para la igualdad de condiciones laborales, que existan beneficios para los trabajadores y estar en eso. Esa fue mi gran motivación. Fue algo personal.

¿Te viste enfrentada a alguna dificultad al momento de postular al cargo?

Sí, pero fue un tema más que nada mío. Es difícil ocupar este cargo porque tienes la responsabilidad que depositan en ti todos tus compañeros que votan por ti entonces fue muy difícil el tema, sentir ese síndrome del impostor y pensar “ yo no estoy preparada para el cargo”, pero a medida que ha pasado el tiempo cada vez se ha hecho más llevadero porque bueno, somos cinco dirigentas mujeres, entonces existe en el sindicato mucho compañerismo entre nosotras. Tratamos entre las cinco de llevar la organización y no por ser presidenta considerar tener un cargo mayor o liderar. Toda decisión que se tome, se hace en conjunto. 

¿Por qué crees importante que las mujeres participen en la dirigencia sindical?

Bueno, históricamente ha habido una desigualdad súper importante ya sea salarial, de puestos de trabajo… entonces creo que es importante el rol de la mujer en el ámbito sindical porque muchas veces nos vemos disminuidas en los mismos criterios para postular a un nuevo cargo porque eres mujer, tienes hijos o podrías quedar embarazada entonces en esa desigualdad creo que solo las mujeres podemos equilibrar un poco la balanza.

¿Cómo llevar a cabo la conciliación entre la vida personal y laboral?

Bueno, nuestro sindicato tiene una ventaja. Las dirigentas somos “liberadas”, por lo tanto nos dedicamos cien por ciento al trabajo sindical. Entonces nosotros cumplimos una jornada normal de trabajo, de ocho horas diarias y se hace más llevadero porque una dirigenta que tenga que cumplir una jornada laboral y ser dirigenta fuera de su horario o solo con esas horas que le da el código del trabajo es mucho más difícil. Esa medida se ganó, en primera instancia, porque las dirigentas que estuvieron en su época no cumplían funciones para la empresa, entonces se liberaron automáticamente y después, a través de un juicio, quedó estipulado en un contrato colectivo. Entonces todas las personas que sean dirigentes van a estar liberadas y así se hace mucho más llevadero que cumplir una jornada laboral.

¿Cómo fomentarías la participación sindical?

En estos tiempos igual es difícil porque estamos en un sistema bastante individualista entonces el compañero, el trabajador que se asocia al sindicato pregunta primero cuáles son los beneficios, qué es lo que va a obtener, entonces es muy difícil que una persona se sindicalice por convicción; se hace mucho más complicado crear la consciencia de que somos una comunidad y que debemos luchar todos para lograr un objetivo. En ese sentido, se hace difícil llevar a cabo una negociación colectiva o tomar decisiones porque se ve el individualismo y eso también produce una baja participación. Se sindicalizan más que nada cuando uno entra en un proceso de negociación colectiva, luego decae y después se vuelve a retomar cuando tenemos negociaciones.



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