“Queremos que las pequeñas y medianas empresas que generan valor vuelvan a crecer, queremos terminar con los abusos que tan justamente han indignado a nuestro pueblo y queremos volver a generar en conjunto, dando seguimiento a las buenas ideas de antes, empleo digno”. Fue parte del discurso presidencial con que inició el nuevo mandato.
[14 de marzo de 2022] El pasado viernes 11 de marzo se realizó la ceremonia de cambio de mando, donde asumió el nuevo gobierno liderado por el presidente Gabriel Boric. La ceremonia contó con 42 invitados especialmente elegidos por el mandatario, entre quienes destacan la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Silvia Silva, y el presidente de la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), José Pérez Debelli.
Como parte de su primer discurso desde La Moneda, el mandatario recalcó el compromiso con los trabajadores y trabajadoras asumido en su plan de gobierno, afirmando que impulsarán el proyecto de 40 horas semanales y que se trabajará por conseguir empleo y pensiones dignas.
“Que los vecinos y vecinas de Antofagasta, de Maipú, de Hualpén sientan tranquilidad al volver de sus trabajos y tengan tiempo para vivir junto a sus familias. Por eso impulsaremos, como hemos comprometido, las cuarenta horas”. Señaló el mandatario, que tiene como meta finalizar su periodo fijando el sueldo mínimo en $500.000.
Por otro lado, junto con criticar a quienes han hecho “de la previsión un negocio”, el nuevo presidente mencionó la importancia de reconocer el trabajo no remunerado de las mujeres que asumen labores de cuidado de menores o adultos mayores, una demanda creciente que se vio reflejada el pasado 31 de enero en el apoyo ciudadano a la iniciativa popular de norma “Por el reconocimiento constitucional al trabajo doméstico y de cuidados”, que tras alcanzar las firmas necesarias será analizada en la Convención Constitucional.
Otro de los aspectos a destacar dentro del primer discurso presidencial, es la valoración que se otorgó al trabajo realizado por los ciudadanos y ciudadanas “de a pie”:
“Chilenas y chilenos, mi sueño es que cuando terminemos nuestro mandato (…) sintamos que hay un país que nos protege, que nos acoge, que nos cuida, que garantiza derechos y retribuye con justicia el aporte y el sacrificio que cada uno de ustedes, de los habitantes de nuestra patria, hacen para el desarrollo de nuestra sociedad”.
“Sabemos también que la economía sigue resentida y que el país necesita ponerse de pie, crecer y repartir de manera justa los frutos de este crecimiento (…). Necesitamos redistribuir la riqueza que producen los chilenos y chilenas, que producen quienes habitan nuestra patria”.
Lo anterior se condice con el plan de gobierno propuesto, donde en el apartado Nuevo modelo de relaciones laborales, se señala como fundamental el “otorgar importancia estratégica al trabajo como uno de los elementos consustanciales a la dignidad humana, como medio de subsistencia material de las grandes mayorías, como mecanismo de inclusión y de valoración social del ser humano y como un componente productivo cada vez más relevante”.
