ENTREVISTA: Margarita Hormazábal, presidenta de la asociación de funcionarios de la Dibam habló con Sindical.cl y explicó cuáles son  los pasos a seguir en este paro indefinido y las razones por las que piden la salida del director Ángel Cabezas. La principal preocupación de los trabajadores es poder dar mayor presencia y empoderamiento al patrimonio chileno.

Por Paula Ampuero Ulloa

Las bibliotecas, coordinaciones y museos no están atendiendo público a largo de todo el país. En Santiago, edificios emblemáticos como la Biblioteca Nacional, el Museo de Bellas Artes y el Museo de Historia Natural tienen sus puertas cerradas. Margarita, en esta conversación, ahonda en el presente del conflicto que aqueja a los funcionaros de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, Dibam (VER NOTA ANTERIOR).

¿En qué están los trabajadores de la Dibam?

El 8 de enero vamos a tener un plebiscito bastante serio e informado. Entregaremos un informe jurídico con el articulado (a las bases) y todo el trabajo que vamos a tener que hacer con el legislativo. Porque para cambiar cosas, tenemos que tener claridad de cuáles son los puntos más problemáticos. El 14 de enero tendremos nuestra primera reunión con la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados y sentarnos en una mesa donde se estén las máximas autoridades, de educación, cultura, y el director de la Dibam.

 ¿Qué se decide con el plebiscito?

La continuidad del paro, con información sabiendo por qué y para qué. Necesitamos ir al congreso, cuando se nos cite el 14, con el documento estudiado, eso lo tenemos que hacer en estos días. Mantener el paro también nos serviría para reforzar todo lo que tiene que ver con los temas que se vienen hacia adelante, con el trabajo con el legislativo, la mesa y todo eso. Se nos viene harta pega.

Salida del director

¿Cuál es el discurso de Ángel Cabezas?

Según el director el proyecto es lo mejor para nosotros, técnicamente lo aprueba, pero no te da ningún argumento técnico. Habla del miedo a la politización, de la estabilidad laboral, que muy politizado después vamos a perder el trabajo. Para mí eso es estancabilidad laboral, es proteger a un grupo de personas, porque estamos súper claros que son los cargos de arriba los que se politizan y vienen por política partidista. En ese sentido él lo defiende (el proyecto enviado al Congreso), pero no sabe argumentarlo.

Hizo dos reuniones con los funcionarios, y la gente quedó peor. Él es nuestra autoridad y la gente se pregunta ¿de verdad tiene este discurso? y ¿con esto se va a presentar en todas partes? Después de eso quedaron más asustados, porque él no tiene liderazgo como para llevar este proceso adelante.

¿Por qué piden que deje de dirigir la Dibam?

Al mantenerse él como director, el va a ir con su postura -que es su tema personal respecto a que seamos un servicio-, porque considera que es lo mejor para nosotros. Pero, nosotros los trabajadores estamos pensando que esta es la oportunidad de dar el salto, de crecer de verdad, de poder atender las demandas de la ciudadanía y no perpetuar las carencias que tenemos hoy en infraestructura y en el cumplimiento de la misión (de la institución). Porque, ahora, no podemos cumplir la misión que tenemos, que es rescatar, resguardar, conservar y difundir el patrimonio de Chile. Y rescatamos la mitad, resguardamos la mitad, y así, porque no podemos más.

Relación con las autoridades

¿Es efectivo que existe el sentimiento de abandono por parte del Estado?

Ese es el sentimiento que hemos tenido durante estos 86 años de la Dibam. Hemos sido para el ministerio de Educación como los niños bien portados. Nos dan poca plata, pero cumplimos con las metas que nos proponen. Trabajamos súper bien, tenemos la camiseta tatuada, porque no la tenemos puesta y eso implica en que cuando se reparten los recursos no nos dan, porque hacemos lo que podemos con lo que tenemos, y lo que podemos está bien. Para el patrimonio es “haz el día a día”, no te proyectas. No puedes tener una generación de una política a largo plazo, no podemos generar leyes específicas.

Ustedes el año pasado trabajaron con el Ejecutivo el proyecto para llegar a ser Subsecretaría, eso ¿era apoyado por todos los actores?

Estaban adheridas las autoridades al modelo planteado. En junio se nos presentó la macro estructura, no era lo mejor, había que entrar a trabajar para mejorarlo, pero sí, nos unimos todos y dijimos para allá vamos. Anfudibam, Anfucultura y los trabajadores del consejo de monumentos nacionales, éramos los tres que conversábamos con el Ejecutivo.

¿Cómo se dio ese trabajo al interior de la Dibam?

No se dio con nuestro director. No se sentó con nosotros para decir cómo vamos a armar un modelo para mandarlo al Consejo Nacional de la Cultura; lo armaban ellos solos. En el primer modelo que presentaron hubo cero conversación con nosotros y los siguientes fueron solo informados. Ellos dicen que nosotros participamos, pero eso no fue participación. Entonces, cuando algo no nos parecía y lo decíamos, y no nos hacían caso, nosotros teníamos que esperar la reunión en el Consejo Nacional para, desde allá, incidir la parte que tocaba patrimonio. Por eso también es la molestia que hay acá en el interior con nuestra autoridad, que no nos dio la posibilidad de hacer un trabajo interno primero, eran solo ellos armando modelos a puertas cerradas.

¿De parte de ustedes siempre hubo voluntad de trabajar?

Más que eso hubo demanda. Demandamos desde el principio trabajo en conjunto, mancomunado (VER NOTA ANTERIOR). Ellos siempre han dicho que son la autoridad, que él está en ese cargo, que tiene la potestad para hacer deshacer y, que es de voluntad de él participar o no con las asociaciones gremiales, porque nadie lo obliga a hacerlo así.

La Dibam hoy

¿Cuál es su estrategia ahora?

Revisar el documento, trabajarlo y apuntar a los puntos que nos parezcan más relevantes y preocupantes y darle fuerte con eso para llevar el tema a regiones, que lo puedan entender y puedan demandar. Y así, cuando nos toque ir a la Comisión de Cultura de la Cámara, llegar con una postura que represente a todos los funcionarios informados de la Dibam, y que no sea sólo lo que se le ocurrió a esta presidenta. Además, de continuar con las movilizaciones culturales que hemos estado haciendo para acercar nuestras reivindicaciones a la ciudadanía (VER NOTA ANTERIOR).

¿Cómo calificarían su situación actual?

Hoy estamos todos en paro, somos una sola Dibam y estamos peleando por mejoras a todos. No solo mejoras laborales, sino que una mayor presencia y un mayor empoderamiento del patrimonio. Queremos proyectarnos, queremos trabajar hacia adelante.